El poder transformador o el alcohol es maravilloso y terrible a menudo. Parece abrir una via de entrada en el alma para toda clase de espiritus tonto, loco o malignos, que, siempre y cuando se mantenga en contacto con el cerebro, son capaces de mantener la posesion. Los hombres de la mas amable de la naturaleza cuando esta sobrio, actuan a menudo como locos cuando estaba borracho. Los crimenes y atropellos se cometen, que escandalizan a los autores y la verguenza, cuando la emocion de embriaguez ha fallecido. En relacion con este tema, el Dr. Henry Munroe dice:
"De la experiencia del Sr. Fletcher, que ha prestado mucha atencion a los casos de los borrachos, a partir de las observaciones del Sr. Dunn, en su" Psicologia Medica ", y de las observaciones de los mios, que hay alguna analogia entre nuestra naturaleza fisica y psiquica, porque, como la parte fisica de nosotros, cuando su poder se encuentra en un punto mas bajo, se vuelve susceptible de influencias morbida que, en todo su vigor, pasaria por encima sin efecto, asi que cuando lo psiquico (sinonimo de la moral) la parte del cerebro tiene su funcion saludable perturbada y desquiciada por la introduccion de un veneno morbido como el alcohol, el individuo lo hunde en la depravacion en tales circunstancias, y "se convierte en el tema indefensa de las fuerzas del mal", que no tienen poder contra una naturaleza libre de las influencias morbosas de alcohol ".
Diferentes personas se ven afectadas de diversas maneras por el mismo veneno. La indulgencia en bebidas alcoholicas pueden actuar sobre uno o varios de los organos cerebrales, y como su consecuencia necesaria, las manifestaciones de trastornos funcionales seguira en aquellas de las facultades mentales como estos organos servir. Si la indulgencia se continuara, pues, ya sea desde la nutricion trastornado o lesion organica, manifestaciones que antes habian desarrollado solo durante un ataque de la intoxicacion puede llegar a ser permanente, y terminan en la locura o mania dypso. M. Flourens senalo en primer lugar el hecho de que ciertos agentes morbidos, cuando se introduce en la corriente de la circulacion, tienden a actuar en primer lugar y especialmente en un centro nervioso, con preferencia al de otro, en virtud de alguna afinidad electiva entre esos especiales agentes morbificos y los ganglios de algunos. Asi, en el andar vacilante del hombre borracho, vemos la influencia del alcohol sobre las funciones del cerebelo en el deterioro de su poder de la coordinacion de los musculos.
Algunos escritores sobre las enfermedades de la mente hacen alusion especial a esa forma de demencia llamada 'dypsomania', en la que una persona tiene una insaciable sed de bebidas alcoholicas como una tendencia decididamente maniatico como el de mania homicida, o el deseo incontrolable de quemar, denominado piromania, o para robar, llamada cleptomania.